El pasado domingo 18 de Octubre tuvimos el placer de celebrar el primer torneo de Bolt Action en las instalaciones de La Roca Wargames, donde nos reunimos jugadores de Valencia, Castellón y Cuenca.
Tras una puesta en común de las reglas que se iban a aplicar en la competición, la presentación de los premios y el consabido sorteo, ésta dio comienzo a las 12 del mediodía. Finalmente, tras las bajas a última hora de algunos participantes, pudimos realizar un torneo de 7 jugadores.
El dado decidió que los primeros combates iban a tener como hilo argumental el escenario número 2: máximo desgaste. Éste es el más simple de todos los enfrentamientos; matar enemigos, cuantos más mejor sin concesiones a objetivos o rupturas de frente, la batalla en su estado más puro.
En la mesa 2, Jose con sus alemanes infligió severas pérdidas a los rusos de Gerardo (Rusos) en un combate urbano mucho más favorable a la infantería que a los carros de combate, donde los fusiles de asalto alemanes marcaron la diferencia sobre los fusiles rusos de cerrojo.
Un Stuh 42 se abre camino hacia las líneas rusas
Al mismo tiempo, un servidor (americanos) y Jorge (alemanes) intentábamos matarnos mutuamente en un escenario boscoso donde salir a campo abierto era garantía de aniquilación en una partida que tuvo mucho de ajedrez y más aún de resistencia enconada de las unidades alemanas que se negaban a perecer aún después de sufrir toda la potencia de fuego concentrada del ejército yankee.
Por último, en la tercera mesa Pak (británicos) y Mere (americanos) se disparaban a distancia en un entorno industrial y desolado con pocos lugares donde ponerse a cubierto y donde los aviadores norteamericanos comenzaron a labrar su infausta leyenda en esa jornada.
Contar con una buena sección de reconocimiento siempre es importante...
Al final de la primera ronda, Pak ocupaba el primer lugar tras su arrolladora victoria, dejando en la cola temporalmente a Mere y al resto en un compacto grupo central.
Tras una agradable comida donde se celebró un improvisado y muy animado debate sobre el juego, su aplicación a otras contiendas y los detalles de las batallas matinales, se procedió a continuar con la segunda ronda del torneo.
Una vez realizada la consabida tirada de dado, fue designado el tercer escenario; la defensa de posición donde el atacante debe asaltar las líneas del defensor y conquistar los objetivos en posesión de éste al mismo tiempo que intenta causarle el mayor número de bajas posible.
Las tropas yankees se aproximan al pueblo.
El emparejamiento del primer y segundo clasificado juntó a Pak (británicos) y a Jose (Alemanes) en el escenario boscoso que terminó con empate. Los británicos sólo pudieron conseguir un objetivo en su ataque, pero su mayor número de bajas infligidas equilibró la batalla.
Los paracaidistas británicos se despliegan bajo la cobertura del bosque.
En la mesa de combate urbano, Rubén y Jorge, ambos alemanes obtuvieron el mismo resultado, equilibrando las bajas los puntos conseguidos por objetivos.
Cerrando esta segunda fase, Mere y yo nos enfrentábamos con ejércitos americanos de distinta configuración. Únicamente coincidimos en el observador avanzado aéreo, lo que dio lugar a una de las situaciones más curiosas que recuerdo en este juego; sólo uno de los ataques de la aviación consiguió cumplir su misión atacando al enemigo, el resto, otros tres, fueron sufridos por el propio ejército del jugador que lo activó. Al final la partida quedó en tablas; yo no conseguí ningún objetivo y él sufrió una enorme carnicería en sus tropas.
La fuerza aérea norteamericana atacando (de nuevo) a sus propias tropas.
Las espadas quedaban en todo lo alto para la última ronda y el dado decidió que todo se decidiría por medio del escenario 1: envolvimiento. En él, el jugador atacante debe arrollar las líneas enemigas y atravesarlas con el mayor número de unidades posible. Debe avanzar sin reparar en las pérdidas hasta colapsar al enemigo y vencer su resistencia.
En la mesa donde se jugaba el torneo hubo emoción pero finalmente los británicos de Pak vencieron a los alemanes de Rubén, consiguiendo el primero el título de ganador del I torneo de Bolt Action La Roca Wargames, que viajaba hacia Castellón.
En la mesa del desierto, Jorge con sus alemanes conseguía el subcampeonato para Cuenca arrollando las líneas alemanas de Jose, que no pudieron contener la embestida.
En la mesa de la zona industrial, tras una de las partidas más nefastas para mí y más extrañas que he tenido nunca, fui literalmente arrasado por una horda de unidades rusas del ejército de Gerardo, quedando muy poco vivo de mi ejército americano original. Curiosamente, la combinación del fin de la partida en el cuarto turno por falta de tiempo y la lenta y metódica masacre que los rusos practicaron con mis tropas hicieron que no pudiera puntuar por atravesar las líneas, mientras que sus pocas bajas puntuaron lo suficiente para darme la victoria más inesperada que recuerdo, en la que los dos ataques aéreos que activé acabaron atacando a mis propias tropas.
Las tropas rusas inician el asalto a las posiciones yankees
Para finalizar, se repartieron los premios entre todos los jugadores; Carros Panther y Sherman, suplementos, reglamentos… y todos pudimos disfrutar de un domingo de batallas con nuestro juego favorito de la Segunda Guerra Mundial. Quedan muchas cosas por mejorar para la próxima edición pero creo que llevamos un buen camino.
Los generales, tras la batalla.
Gracias a todos los que vinisteis, espero que lo hayáis disfrutado tanto como lo disfruté yo.
Clasificación final (tercera ronda)
1. Pak (británicos)- 45 Puntos
2. Jorge (alemanes) – 30 Puntos
3. Quique (americanos) – 20 Puntos
4. Jose (alemanes)- 15 Puntos
5. Rubén (alemanes)- 15 Puntos
6. Mere (americanos)- 15 Puntos
7. Gerardo (Rusos) 14 puntos
Player, gamer y Wargamero. Me inicié como Bloguero a principios del año 2013 creando el Taller de Yila, blog dedicado a la actualidad de juegos de mesa, wargames y otras cosas Frikis.
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